MUSEO Picasso de Málaga
PICASSO. CABALLOS
17/05/2010 A 5/09/2010
Último domingo del mes, entrada gratuita.
Precio de la exposición. 4,5 €
Quiero empezar la crítica hablando del precio de 4.50 € la entrada. Habitualmente los museos en España son gratis, éste, no siempre. Me parece bien que paguemos por la cultura, como pagamos por otros espectáculos. Esta exposición es muy buena, es Picasso. ¿Por qué?
En primer lugar por la solvencia de la comisaria, que es Dominique Dupuis-Labbé, Conservadora Jefe en el Departamento de Colecciones de la Dirección de Museos de Francia y profesora en la École du Louvre. Ha elegido unas 50 obras del pintor, con el objetivo de explorar el significado de la figura del caballo en la obra del artista.
Ojo con las La colecciones prestadoras: Museu Picasso, Barcelona; Centre Georges Pompidou, Paris; Tate Gallery, Londres; University of Edinburgh Fine Art Collection, Edimburgo; MOMA Museum of Modern Art, New York y The Phillips Collection, Washington; así como de varias colecciones privadas en Europa y Estados Unidos, entre otras entidades públicas y privadas. Otro argumento
Solo eso justifica el co-pago de los que la vamos a disfrutar, y que no solo corra con los gastos la Administración Pública.
La exposición comienza con PEQUEÑO PICADOR AMARILLO. Una joya de un chaval de 8 o 9 años. Pero hay en Málaga 2 cuadros más, EL VIEJO DE LA MANTA Y PAREJA DE ANCIANOS que no podemos ver, desde que se cerró el museo provincial, que estaba en este mismo palacio de Buenavista. Solo reseñar que existen cuadros históricamente significativos para conocer al niño Picasso en su ciudad natal, que por “competencias” o incompetencia de funcionarios que deciden, al público se nos escamotea la posibilidad de verlos. Mediocridades de políticos y de funcionarios.
Pues bien, lo que podemos ver en estos primeros cuadros de infancia, es la composición, el uso del color y como es capaz de evocarnos un caballo, con apenas unos pocos trazos. Recordar que su padre era profesor de dibujo en la escuela de San Telmo. En otros cuadros, ya con 19 años, combina el movimiento con la quietud y nos muestra estampas urbanas. Ya se barrunta la que sería su ideología izquierdista.
La exposición nos introduce en lo que es el cubismo. Picasso descompone la figura del caballo y la vuelve a componer, para que con trazos distintos, vuelva a parecer eso, un caballo. Un caballo, por bien pintado que esté, no es el caballo; pues ese está vivo en el campo, y el del cuadro, no deja de ser una representación ideal. Nuestro celebre malagueños pretende recrear la imagen para significarnos sentimientos. Un ejemplo: La ijada del caballo. En el Guernica, esa ijada del caballo representa la brutalidad de un asesinato en masa de un pueblo. Coge elementos de la naturaleza y les dota de significación, crea el icono (signo con significado). Todo en el cuadro son símbolos, a partir de la figuración de sus sentimientos. Como en Goya y sus Caprichos de la guerra. Angustias por unos paisanos matándose.
Esto mismo vuelve a ocurrir en CABALLO CORNEADO de 1917. Recordar que estábamos en la 1ª guerra mundial. Aquí nos muestra, con la composición del caballo moribundo, el dolor de un cuerno que ha desgarrado las tripas del caballo. Un caballo inservible, que se sacrifica en la fiesta de los toros. El caballo ya no es bueno para nada y en vez sacrificarlos directamente, se usa en la fiesta de los toros. Veo la denuncia: miles de hombres que fueron al campo de batalla a morir por unos ideales compartidos por esas muchedumbres que se recrean en las luchas, también en las luchas desiguales del toro y el caballo en la plaza. Absurdo patriotismo, el de las matanzas. Bien; pues todo esto nos lo muestra descomponiendo la figura real del caballo y reconstruyéndola con sus gestos de dolor, que solo están en su imaginación. Con su “cubismo” nos traslada iconos llenos de significados sobre la fiesta y las batallas; hombres contra hombres o toros contra caballos, con el beneplácito cultural de los que aplauden los lances.
La comisaria, Sra. Dominique, también nos propone entender la perspectiva cubista. A lo largo de las composiciones sobre el circo, se distancia de lo que sería la perspectiva renacentista, líneas que nos dan sensación de profundidad en un cuadro. Sin embargo Picasso inventa la perspectiva plana, pues no las crea en sus composiciones a lo profundo del cuadro, sino a lo ancho. Crea otra sensación de espacio, no quiere imitar a la realidad; sino que la recrea según necesite. Quizás la pintura no sería hoy lo que es –un espacio de creatividad libre del artista- si Picasso no se hubiera atrevido a transgredir la perspectiva “renacentista”.
La exposición incluye fotografías de las ciudades en las que pasó su infancia y juventud: Málaga, La Coruña, Barcelona y Paris para ilustrar referencias concretas de paisajes y personajes urbanos que representaron el entorno del artista y le sirvieron para sus estudios pictóricos.
En general, se puede decir que tenemos una muy bien diseñada muestra de arte en nuestra ciudad, muy cuidada, con un excelente trabajo de la comisaria y de los directivos del Museo. Lamentablemente suele haber, proporcionalmente, pocos malagueños en este Palacio; y si muchos extranjeros. No se si la dirección está haciendo las cosas bien –los ujieres son muy molestos, hablan en voz muy alta y regañan a los visitantes, como si fuéramos niños- para llegar a la ciudad de Málaga.